El Policlínico interesa no sólo a los vecinos del Recinto amurallado, sino a todos los segovianos de la capital y de la provincia que han sido privados de servicios sanitarios necesarios, desaparecidos con su cierre sin que hayan sido ofrecidos en el Hospital general u otros que sin haber existido se presentan como imprescindibles y que podrían ser instalados en este edificio. Estamos pensando en servicios como: camas para medias y largas estancias hospitalarias, servicios de geriatría, cuidados paliativos, hospital de día para ancianos, tratamientos quimioterapéuticos, cirugías ambulatorias, terapias ocupacionales y rehabilitaciones, etc., etc.
Como han puesto de manifiesto diferentes colectivos, de forma bien documentada la pérdida de 100 plazas hospitalarias que ha llevado consigo el cierre del Policlínico y que no han sido aumentadas en el Hospital General.
Ni antes ni ahora hemos entendido por qué se cerró el edificio y siempre sospechamos y así lo manifestamos en su día, que la supuesta necesidad de estudio técnico sólo fuera una excusa para su abandono definitivo.
El edificio presenta una estructura que permite implantar y mantener estos servicios a la vez que se vayan rehabilitando otras zonas, tal como se ha hecho, siendo de mucha mayor envergadura, la reforma y ampliación del Hospital General.
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