En la presentación, Fuen, en representación de Segovia Feminista, tras presentar a las ponentes, incidió en el propósito de estas jornadas, que no es otro que escuchar a todas las mujeres y las distintas opiniones que tienen sobre el tema del feminismo y la prostitución, pues todas están de acuerdo en un aspecto fundamental que es la preocupación por las mujeres más vulnerables y sin derechos.
También expresó su malestar por los ataques recibidos en redes sociales con descalificaciones e insultos que en nada ayudan a alcanzar un objetivo común. A continuación tomó la palabra Bárbara de CATS (Comité de Apoyo a las Trabajadoras del Sexo). Explicó su postura de reconocer el trabajo sexual como un trabajo, sacando las leyes referidas al mismo del código penal para incluirlas dentro del ámbito laboral, de forma que se garanticen derechos y condiciones a las trabajadoras del sexo.
Reconoció que existe la trata, pero que no todos los casos de prostitución son trata. Explicó su postura sobre la visión abolicionista, calificándola como desastrosa por los efectos que acarrearía y por carecer de alternativas para las trabajadoras del sexo.
Comenzó diciendo que las trabajadoras del sexo son personas y por lo tanto tienen iguales derechos humanos, laborales, sanitarios y cualquier otro que cualquier persona.
Aportó numerosos datos estadísticos esclarecedores de la situación actual, centrándose en la situación de las personas latinoamericanas y explicando que hay muchas situaciones y casos distintos. Ejemplificó situaciones concretas sobre las causas, los traficantes, las formas de llegada a España, los distintos lugares y condiciones en que se ejerce la prostitución, las deudas contraídas, el acoso policial, la situación legal en cada caso, los precios de los servicios y de los gastos, las formas en que CATS trabaja y otros temas más. Especal atención prestó a las condiciones lamentables y carentes de los más básicos derechos humanos en las que muchas veces se encuentran las trabajadoras del sexo. Concluyó pidiendo reformas en la ley de extranjería, regularización del trabajo sexual y luchar contra el foco del problema: un sistema que produce pobres y que es el origen del problema. La claridad de su exposición y los datos aportados fueron reconocidos por el público asistente al acto con un sincero aplauso. Tras su intervención tomó la palabra Ninfa de Afemtrans (Asociación Feminista de Trabajadoras Sexuales), quien se definió a sí misma como puta callejera que ha desarrollado sus ya veinte años de trabajo en Madrid, en lugares como la Casa de Campo, el polígono de Villaverde y el Corredor del Henares.
Su sincera y directa intervención la inició con una explicación de la situación de las trabajadoras del sexo en los últimos veinte años y la incidencia que en ella han tenido y tienen temas como la Ley de Extranjería, la Ley Mordaza, el respeto o la falta del mismo por parte de la policía, la documentación, las situaciones de desamparo y falta de derechos, el apoyo mutuo, los recursos y dificultades que inciden en el trabajo y la necesidad de una regulación del mismo.
Tras su intervención, agradecida con sinceros aplausos, se abrió un coloquio con el público asistente que mayoritariamente felicitó a las ponentes y su explicación y en el que se trataron temas como la relación con las posturas abolicionistas, el miedo a maleantes y policías, la regularización y sus pros y contras en los distintos países (Nueva Zelanda, Suecia, Países Bajos…), la incidencia de la ley del Solo sí es sí, la situación de vulnerabilidad de las trabajadoras del sexo y otros temas más.
Un nuevo aplauso de agradecimiento por la valentía y la claridad de las ponencias y del debate posterior, puso fin a esta interesante jornada.
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