La Plataforma Unitaria contra la Crisis y la Cumbre Social de
Segovia pueden considerar todo un éxito el resultado de la convocatoria. La
manifestación convocada para expresar el rechazo de las políticas de ajuste y
los recortes superó este sábado la adversidad de la temperatura bajo cero y la
amenaza de nieve y reunió a cerca de 3.000 personas en una marea ciudadana que
recorrió el itinerario de costumbre, desde la sede de los sindicatos en la avenida Fernández Ladreda a la Plaza Mayor, aunque con dos
paradas muy significativas: una, de breves minutos, en la entrada la oficina
principal de Caja Segovia, y otra en la plaza del Seminario, sede de la
Subdelegación del Gobierno. En las dos paradas arreciaron las voces contra la
corrupción y los presuntos corruptos.
Adultos y jóvenes, niños, padres y abuelos formaron esta
marea ciudadana, en la que participaron las formaciones de izquierda que
impulsan la Cumbre Social de Segovia y la plataforma contra la crisis, además
de otros colectivos como la recién constituida Asamblea Parados en Acción y los
que propugnan la defensa de los servicios públicos, entre los que cobraron
protagonismo quienes apoyan la educación pública y los sanitarios de la Marea Blanca
con sus batas y las pancartas contra los recortes, las entidades financieras y
los desahucios.
FUENTE: Tres mil personas se suman a la marea ciudadana contra la crisisCiudadanos y colectivos marchan unidos contra el paro, la corrupción, recortes y represión
Al finalizar la manifestación en la Plaza Mayor se leyo un comunicado que reproducimos algunos parrafos:
¡Nunca callarán nuestra
voz gritando por el trabajo y la democracia; por una nueva sociedad basada en
la satisfacción de las necesidades de las personas y no en el lucro de un
puñado de especuladores y parásitos!
¡Nunca callarán nuestra
voz cuando digamos que este gobierno es un mal gobierno, que nos ha mentido
incumpliendo uno tras otro sus compromisos electorales, que nos conduce a la
pobreza y la miseria y nos hunde más en la crisis; un gobierno podrido hasta la
médula!
¡No nos callarán!
¡Exclamamos que Rajoy y su Ejecutivo tienen que dimitir!: ¡¡¡Gobierno dimisión!!!
Pero ese grito contra el
gobierno de Rajoy y contra todos aquellos que lleven a cabo las mismas
políticas, contra las injusticias, por el futuro, debe ser un grito colectivo.
¡Juntos podemos! Separados, divididos, no somos nada. Y eso, dividirnos, lo
saben hacer muy bien. De hecho no dejan de hacerlo: dividir a los trabajadores
autóctonos de los inmigrantes; a los empleados públicos de los trabajadores de
la empresa privada; a los funcionarios de los interinos; al sindicalismo de la
clase obrera. Enfrentan a unos sectores con otros.
Todos juntos:
¡Contra el paro, los
recortes, la corrupción y la represión!
¡Por el trabajo y la
democracia!
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