Concentración en Segovia "No a la Guerra y en solidaridad con la gente de Ucrania convocada por el Foro Social de Segovia, ha contado con la presencia de la comunidad ucraniana residente .
Para hacer un llamamiento a los gobiernos de todo el mundo desde Segovia a los pies del Acueducto, para defender la verdad y la libertad, de plantarle cara a las agresiones sin sentido y al belicismo, y de garantizar la paz que el mundo necesita tan desesperadamente.
Nos solidarizamos con la gente de Ucrania y de Rusia que dice no a la guerra y luchan por la paz
Condena a la invasión de Putin no es solo un ataque a Ucrania. Es un ataque a la libertad, a la democracia y a la verdad
Con la invasión del ejército ruso a Ucrania los tambores de guerra en Europa vuelven a resonar, sin que se nos pueda olvidar que en otras partes del mundo su sonido nunca dejó de oírse. Es justo que alcemos nuestra voz contra esa manera poco civilizada e inhumana de intentar resolver los conflictos por la fuerza, como no debiéramos de silenciarla mientras exista una sola guerra en nuestro mundo. Queremos solidarizarnos con los habitantes de Ucrania, así como con los de otros pueblos que llevan sufriendo décadas de violencia, con explosiones esporádicas de guerra declarada y que ominosamente hemos visto sucederse con la complicidad de nuestros gobiernos, el silencio y clamoroso de nuestros medios de desinformación.
Condena a la invasión de Putin no es solo un ataque a Ucrania. Es un ataque a la libertad, a la democracia y a la verdad
Angel Luis y Raquel han leido un manifiesto:
UNA Y MIL VECES GRITAMOS: NO A LA GUERRA.
Con la invasión del ejército ruso a Ucrania los tambores de guerra en Europa vuelven a resonar, sin que se nos pueda olvidar que en otras partes del mundo su sonido nunca dejó de oírse. Es justo que alcemos nuestra voz contra esa manera poco civilizada e inhumana de intentar resolver los conflictos por la fuerza, como no debiéramos de silenciarla mientras exista una sola guerra en nuestro mundo. Queremos solidarizarnos con los habitantes de Ucrania, así como con los de otros pueblos que llevan sufriendo décadas de violencia, con explosiones esporádicas de guerra declarada y que ominosamente hemos visto sucederse con la complicidad de nuestros gobiernos, el silencio y clamoroso de nuestros medios de desinformación.
Por todos ellos queremos alzar nuestra voz: por los ucranianos que van a sufrir los devastadores efectos de una guerra de la que ellos van a ser las principales víctimas sin obtener ningún beneficio a cambio; por los palestinos que llevan decenios de ocupación de sus tierras y que sufren diariamente la opresión del ejército y los colonos de Israel; por los saharauis abandonados por España y entregados a la persecución y expolio de su vecino el rey de Marruecos y los oligarcas que le sustentan, sin que ningún país occidental alce su voz ante el continuado incumplimiento de la legalidad internacional; por el pueblo yemení cuyo país está siendo destruido con armas occidentales, algunas proporcionadas por España, y muchos más que llevamos en nuestros corazones. Todas y cada una de esas víctimas claman por la violencia que acabó con sus vidas, evidencia del mundo en que vivimos, plagado de injusticias, en el que la población civil es la principal rehén de los conflictos mientras se destruye el mundo en que vivían y son empujadas al exilio. Buena parte de los refugiados y migrantes que llegan a Europa son los afortunados que lograron huir de sus tierras devastadas: Siria, Irak, Afganistán, Libia, Senegal, Costa de Marfil, y muchos más a los que tratamos como pertenecientes a una raza inferior y peligrosa. Todos ellos son los desechos de las políticas destructoras, cuando no directamente asesinas, que occidente promueve en la mayor parte del mundo, buscando exclusivamente el beneficio de sus grandes corporaciones o los intereses geopolíticos de las grandes potencias imperiales, como es el caso del conflicto desatado entre USA y Rusia con Ucrania como víctima. La guerra no es la continuación de la política por otros medios, es el fracaso de la política, ojala la invasión de Ucrania pueda servir de lección, mientras tanto los muertos los seguiremos poniendo nosotros.
UNA Y MIL VECES NO A LA GUERRA.
No hay comentarios:
Publicar un comentario