Segunda Jornada del XIV Encuentro de Escritores “Otra forma de pensar, otra forma de escribir”
Vídeo de la jornada del sábado, 5 de octubre de 21019.
Momentos:
00:00:00 Raquel Casas.
00:03:00 Marife Santiago Bolaños.
00:15:00 Fanny Rubio.
00:25:39 Antonino González Canalejo.
00:42:00 Matías Escalera Cordero.
01:03:04 Pablo del Barco Alonso.
01:24:25 Ana Pérez Humanes (desde el público).
01:26:10 Matías Escalera Cordero.
01:28:42 Ana Pérez Humanes (desde el público).
01:31:20 Marife Santiago Bolaños.
01:36:20 Fanny Rubio.
01:40:50 Laura Martínez.
01:44:48 Ana Pérez Humanes.
El sábado 5 de octubre tuvo lugar la Segunda Jornada del XIV Encuentro de Escritores organizado por el Foro Social de Segovia.
Tras la presentación de Raquel Casas, en nombre del Foro Social, abrió el turno de ponencias Marifé Santiago Bolaños, que comenzó su intervención recordando a Andrés Sorel como una de las personas que han dejado huella en ella, especialmente por su generosidad sin límites y sus ganas de trabajar. Destacó su compromiso en la lucha contra la injusticia y su compromiso con el dolor de los oprimidos. También relató su trabajo constante a favor del respeto a los Derechos Humanos y de la educación, recordando algunos momentos de dinamización cultural que ambos compartieron.
Continuó la jornada con el turno de Fanny Rubio, quien hizo hincapié en la imagen de un Andrés Sorel disidente, como aquella persona que mantiene el hilo de los sueños. Revivió con los asistentes sus vivencias con Andrés y su hermano por los pasos de la poesía y el comunismo y arribó al momento en el que les unió un fuerte vínculo con los desamparados. No olvidó su compromiso con los derechos de los escritores y con la Literatura en general, advirtiendo del peligro que corre de la conversión de la palabra en un espectáculo con el amparo de la crisis económica y el poder.
Antonino González Canalejo nos acompañó por un impresionante recorrido por la vida y el pensamiento de Andrés Sorel. Comenzó por su educación en los Misioneros, enfocada hacia un Nacional Catolicismo y un anticomunismo, lo que provocó una reacción de rebeldía en Andrés que le llevó a un compromiso ético e independiente con los oprimidos, considerando el socialismo como una realización plena del hombre de la calle, que en ocasiones llega a ser un ser desdichado por la avaricia de los poderosos. Ante esto aparece la denuncia de las mafias que explotan y de las multinacionales que convierten a los gobiernos en títeres. También nos trasladó a sus momentos en los que trabajó como maestro en escuelas rurales, acción por las que es represaliado, pero que dio un importante impulso a su vida como escritor y como luchador contra el embrutecimiento de los cerebros humanos. Así emerge la figura de Sorel como luchador contra el olvido y no violento, partidario del diálogo y la palabra frente a un mundo violento.
Intervino a continuación Matías Escalera Cordero para describir a Andrés Soler como un referente intelectual como impulsor de jornadas sobre la II República y como un comunista incómodo, persistente hasta el final e imprescindible. En las formas siempre mantuvo la escritura a mano en un cuaderno, guardando sus escritos en carpetas y difundiendo sus pensamientos a través de “La Antorcha”, todavía y siempre en el recuerdo de cuantos la siguieron con asiduidad. Matías Escalera leyó algunos de sus propios poemas intentando con ellos, según sus propias palabras, expresar el amor y el poder más allá del romanticismo.
Cerró el turno de intervenciones Pablo del Barco Alonso, recordó su relación con Andrés Sorel como un sentimiento íntimo de castellanos viejos que se instaló entre ambos. También les unió la crítica hacia la situación social y política y el estudio de la obra de Machado. Definió a Sorel como un hombre de gran calidad de ideas, de lenguaje y de acción, que contaba bien los problemas y siempre planteaba líneas de acción futura y soluciones. Dedicó gran parte de su intervención a la lectura de algunos de sus poemas y a presentar su última obra “Pintar como un poeta, escribir como un pintor” en el que trata de romper con el concepto de arte único y de fundir la poesía y el arte gráfico en una poesía visual.
Tras las ponencias, los asistentes intervinieron, recordando algunas de las apariciones públicas de Andrés Sorel, siempre de forma altruista y acercándose a todo tipo de público. También se conversó sobre la necesidad de llevar un homenaje de reconocimiento al mundo académico universitario y como colofón las escritoras y escritores presentes leyeron fragmentos de algunas de sus obras.
Esta segunda jornada de reflexión y debate concluyó con unas emotivas palabras de Laura Martinez, hija de Andrés Sorel, que fueron recibidas por el público asistente con una muy sentida ovación y con el obsequio del Foro Social de Segovia a Ana Perez, su compañera de tantos años, de un pequeño recuerdo de estas jornadas.
Raquel Casas, tras moderar las dos jornadas de los encuentros, cerró el acto agradeciendo de nuevo a la Academia de San Quirce, a ponentes y asistentes su compromiso para que estas jornadas se hayan celebrado una vez más e invitando a seguir participando en las mismas en ediciones sucesivas.
El sábado 5 de octubre tuvo lugar la Segunda Jornada del XIV Encuentro de Escritores organizado por el Foro Social de Segovia.
Tras la presentación de Raquel Casas, en nombre del Foro Social, abrió el turno de ponencias Marifé Santiago Bolaños, que comenzó su intervención recordando a Andrés Sorel como una de las personas que han dejado huella en ella, especialmente por su generosidad sin límites y sus ganas de trabajar. Destacó su compromiso en la lucha contra la injusticia y su compromiso con el dolor de los oprimidos. También relató su trabajo constante a favor del respeto a los Derechos Humanos y de la educación, recordando algunos momentos de dinamización cultural que ambos compartieron.
Continuó la jornada con el turno de Fanny Rubio, quien hizo hincapié en la imagen de un Andrés Sorel disidente, como aquella persona que mantiene el hilo de los sueños. Revivió con los asistentes sus vivencias con Andrés y su hermano por los pasos de la poesía y el comunismo y arribó al momento en el que les unió un fuerte vínculo con los desamparados. No olvidó su compromiso con los derechos de los escritores y con la Literatura en general, advirtiendo del peligro que corre de la conversión de la palabra en un espectáculo con el amparo de la crisis económica y el poder.
Antonino González Canalejo nos acompañó por un impresionante recorrido por la vida y el pensamiento de Andrés Sorel. Comenzó por su educación en los Misioneros, enfocada hacia un Nacional Catolicismo y un anticomunismo, lo que provocó una reacción de rebeldía en Andrés que le llevó a un compromiso ético e independiente con los oprimidos, considerando el socialismo como una realización plena del hombre de la calle, que en ocasiones llega a ser un ser desdichado por la avaricia de los poderosos. Ante esto aparece la denuncia de las mafias que explotan y de las multinacionales que convierten a los gobiernos en títeres. También nos trasladó a sus momentos en los que trabajó como maestro en escuelas rurales, acción por las que es represaliado, pero que dio un importante impulso a su vida como escritor y como luchador contra el embrutecimiento de los cerebros humanos. Así emerge la figura de Sorel como luchador contra el olvido y no violento, partidario del diálogo y la palabra frente a un mundo violento.
Intervino a continuación Matías Escalera Cordero para describir a Andrés Soler como un referente intelectual como impulsor de jornadas sobre la II República y como un comunista incómodo, persistente hasta el final e imprescindible. En las formas siempre mantuvo la escritura a mano en un cuaderno, guardando sus escritos en carpetas y difundiendo sus pensamientos a través de “La Antorcha”, todavía y siempre en el recuerdo de cuantos la siguieron con asiduidad. Matías Escalera leyó algunos de sus propios poemas intentando con ellos, según sus propias palabras, expresar el amor y el poder más allá del romanticismo.
Cerró el turno de intervenciones Pablo del Barco Alonso, recordó su relación con Andrés Sorel como un sentimiento íntimo de castellanos viejos que se instaló entre ambos. También les unió la crítica hacia la situación social y política y el estudio de la obra de Machado. Definió a Sorel como un hombre de gran calidad de ideas, de lenguaje y de acción, que contaba bien los problemas y siempre planteaba líneas de acción futura y soluciones. Dedicó gran parte de su intervención a la lectura de algunos de sus poemas y a presentar su última obra “Pintar como un poeta, escribir como un pintor” en el que trata de romper con el concepto de arte único y de fundir la poesía y el arte gráfico en una poesía visual.
Tras las ponencias, los asistentes intervinieron, recordando algunas de las apariciones públicas de Andrés Sorel, siempre de forma altruista y acercándose a todo tipo de público. También se conversó sobre la necesidad de llevar un homenaje de reconocimiento al mundo académico universitario y como colofón las escritoras y escritores presentes leyeron fragmentos de algunas de sus obras.
Esta segunda jornada de reflexión y debate concluyó con unas emotivas palabras de Laura Martinez, hija de Andrés Sorel, que fueron recibidas por el público asistente con una muy sentida ovación y con el obsequio del Foro Social de Segovia a Ana Perez, su compañera de tantos años, de un pequeño recuerdo de estas jornadas.
Raquel Casas, tras moderar las dos jornadas de los encuentros, cerró el acto agradeciendo de nuevo a la Academia de San Quirce, a ponentes y asistentes su compromiso para que estas jornadas se hayan celebrado una vez más e invitando a seguir participando en las mismas en ediciones sucesivas.
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