CRÓNICA DE UNA CRISIS ANUNCIADA
A lo largo de los últimos meses de 2008 hemos asistido al estallido de la burbuja financiera que ha supuesto una crisis sin precedentes. La diferencia con otros periodos de depresión previos radica en primer lugar en su carácter global: en una economía crecientemente globalizada y financiarizada, atraviesa las fronteras a velocidad de vértigo e impacta en todos los países del globo, a diferencia de lo que ocurrió en 1929. Por otra parte nos enfrentamos a una crisis multidimensional, ya que arrastra consigo una crisis de valores, ecológica, energética, alimentaria, económica, política y social. Por último, en esta ocasión el capital no puede tirar de un aumento de productividad a partir de la explotación intensiva de combustibles fósiles y otros recursos no renovables para reactivar la economía, ya que éstos son cada vez más escasos. Por ello, podríamos hablar también de una crisis civilizatoria, pues la lógica de acumulación en la que se basa todo el sistema se muestra incompatible con la vida tanto de la humanidad como del planeta. Un modelo basado en el incremento rápido y sin fin del beneficio, en la inequidad, y que obvia los límites del planeta, éste sí, “finito”, no puede sino suponer una situación de crisis constante. Sumar que los poderes públicos no deben permitir que la sociedad quede supeditada a los intereses del mercado.
E n el caso concreto del Estado Español la crisis es, si cabe, más profunda y grave. Esto es así por una parte por tratarse de un país con una balanza de pagos muy deficitaria, que hasta ahora ha podido mantenerse gracias al funcionamiento en base al crédito y a losingresos del sector servicios por el turismo. Otro de los motivos fundamentales y ligados con el anterior, es un modelo de desarrollo insostenible basado en el ladrillo y en el turismo como únicos motores. Éste ha sido alimentado y engordado en los ámbitos estatal, autonómico y local por los i-responsables políticos que han bebido insaciablemente del boom inmobiliario especulativo, y a los que ahora cuesta digerir la resaca tras su estallido, y asumir que el llamado “milagro español” se ha convertido en una auténtica pesadilla para la mayoría de la población. Además, los grandes beneficios de la banca, las inmobiliarias y constructoras durante el boom urbanístico y bursátil han sido a costa del derecho a la vivienda, la destrucción del territorio, la corrupción creciente de instituciones públicas y la exclusión social de amplias capas de población...
Por todo esto, las consecuencias de la crisis en España y en Segovia son y seránespecialmente graves, con una recesión sin precedentes, un aumento espectacular del paro, con 11.800 personas en la provincia, un impacto sobre la población inmigrante (de la que se ha alimentado el crecimiento urbanístico y a la que ahora se obliga a “retornar”), etc.
Ante esta situación tan preocupante, sin embargo, la respuesta desde los gobiernosconsiste en dar recursos para mantener la misma dinámica. En lugar de atacar de raíz elproblema se “crea dinero de la nada” y se destinan ingentes cantidades de recursos a ayudas al sector financiero y empresarial, inversión en grandes infraestructuras y continuidad en el fomento público de la construcción en núcleos urbanos. Al destinar los fondos públicos a reactivar y asegurar al sector financiero se consigue embargar los servicios públicos que en situaciones de agudización de la crisis pueden ayudar a paliar los efectos de la desigualdad.Desde el Foro Social de Segovia expresamos nuestro firme rechazo a este tipo de medidas que permiten socializar las pérdidas y que son tomadas ilegítimamente en lo que podríamos llamar un “estado de excepción económico”, que obvia la necesidad de consultar a la ciudadanía con la excusa del miedo. La solución no puede venir de poner parches... Para que otros mundos sean posibles hace falta superar el principio que guía a nuestras sociedades:maximizar el beneficio individual en el menor tiempo posible. Esto implica la necesidad de un cambio de paradigma, un cambio de valores:
Sacar al mercado del epicentro de la realidad y situar en el lugar que merece el mantenimiento y cuidado de la vida.
A lo largo de los últimos meses de 2008 hemos asistido al estallido de la burbuja financiera que ha supuesto una crisis sin precedentes. La diferencia con otros periodos de depresión previos radica en primer lugar en su carácter global: en una economía crecientemente globalizada y financiarizada, atraviesa las fronteras a velocidad de vértigo e impacta en todos los países del globo, a diferencia de lo que ocurrió en 1929. Por otra parte nos enfrentamos a una crisis multidimensional, ya que arrastra consigo una crisis de valores, ecológica, energética, alimentaria, económica, política y social. Por último, en esta ocasión el capital no puede tirar de un aumento de productividad a partir de la explotación intensiva de combustibles fósiles y otros recursos no renovables para reactivar la economía, ya que éstos son cada vez más escasos. Por ello, podríamos hablar también de una crisis civilizatoria, pues la lógica de acumulación en la que se basa todo el sistema se muestra incompatible con la vida tanto de la humanidad como del planeta. Un modelo basado en el incremento rápido y sin fin del beneficio, en la inequidad, y que obvia los límites del planeta, éste sí, “finito”, no puede sino suponer una situación de crisis constante. Sumar que los poderes públicos no deben permitir que la sociedad quede supeditada a los intereses del mercado.
E n el caso concreto del Estado Español la crisis es, si cabe, más profunda y grave. Esto es así por una parte por tratarse de un país con una balanza de pagos muy deficitaria, que hasta ahora ha podido mantenerse gracias al funcionamiento en base al crédito y a losingresos del sector servicios por el turismo. Otro de los motivos fundamentales y ligados con el anterior, es un modelo de desarrollo insostenible basado en el ladrillo y en el turismo como únicos motores. Éste ha sido alimentado y engordado en los ámbitos estatal, autonómico y local por los i-responsables políticos que han bebido insaciablemente del boom inmobiliario especulativo, y a los que ahora cuesta digerir la resaca tras su estallido, y asumir que el llamado “milagro español” se ha convertido en una auténtica pesadilla para la mayoría de la población. Además, los grandes beneficios de la banca, las inmobiliarias y constructoras durante el boom urbanístico y bursátil han sido a costa del derecho a la vivienda, la destrucción del territorio, la corrupción creciente de instituciones públicas y la exclusión social de amplias capas de población...
Por todo esto, las consecuencias de la crisis en España y en Segovia son y seránespecialmente graves, con una recesión sin precedentes, un aumento espectacular del paro, con 11.800 personas en la provincia, un impacto sobre la población inmigrante (de la que se ha alimentado el crecimiento urbanístico y a la que ahora se obliga a “retornar”), etc.
Ante esta situación tan preocupante, sin embargo, la respuesta desde los gobiernosconsiste en dar recursos para mantener la misma dinámica. En lugar de atacar de raíz elproblema se “crea dinero de la nada” y se destinan ingentes cantidades de recursos a ayudas al sector financiero y empresarial, inversión en grandes infraestructuras y continuidad en el fomento público de la construcción en núcleos urbanos. Al destinar los fondos públicos a reactivar y asegurar al sector financiero se consigue embargar los servicios públicos que en situaciones de agudización de la crisis pueden ayudar a paliar los efectos de la desigualdad.Desde el Foro Social de Segovia expresamos nuestro firme rechazo a este tipo de medidas que permiten socializar las pérdidas y que son tomadas ilegítimamente en lo que podríamos llamar un “estado de excepción económico”, que obvia la necesidad de consultar a la ciudadanía con la excusa del miedo. La solución no puede venir de poner parches... Para que otros mundos sean posibles hace falta superar el principio que guía a nuestras sociedades:maximizar el beneficio individual en el menor tiempo posible. Esto implica la necesidad de un cambio de paradigma, un cambio de valores:
Sacar al mercado del epicentro de la realidad y situar en el lugar que merece el mantenimiento y cuidado de la vida.
POR TODO ELLO DESDE EL FORO SOCIAL DE SEGOVIAPROPONEMOS TOMAR MEDIDAS QUE SE ENCAMINEN A:
Defender y ampliar los derechos sociales:✔ Cobertura universal del desempleo.✔ Implantación de la Renta Básica de Ciudadanía.✔ Garantía de servicios públicos (Sanidad, Educación, Dependencia, etc.) gratuitos y de calidad. No ala privatización de esos servicios.✔ Reparto del trabajo sin disminución del salario. Jornada semanal de 35 horas.
Democratizar la economía al servicio y atención de las necesidades de las personas:✔ Nacionalización del sistema bancario y sectores estratégicos de la producción.✔ Control, regulación, limitación y transparencia de circulación de capitales.✔ Incremento del gasto público en servicios sociales. Reducción del gasto militar.✔ Reforma fiscal progresiva. Desaparición de los paraísos fiscales.
Localizar y reconvertir la economía con criterios ecológicos y de justicia social :✔ Crear y potenciar circuitos de producción-consumo locales encaminados a asegurar la soberanía alimentaria. Fomentar la inversión ética y con fines sociales✔ Decrecimiento en el uso de recursos y fomento del autoabastecimiento y ahorro energéticos.Desinversión en energías fósiles y nucleares.
Defender y ampliar los derechos sociales:✔ Cobertura universal del desempleo.✔ Implantación de la Renta Básica de Ciudadanía.✔ Garantía de servicios públicos (Sanidad, Educación, Dependencia, etc.) gratuitos y de calidad. No ala privatización de esos servicios.✔ Reparto del trabajo sin disminución del salario. Jornada semanal de 35 horas.
Democratizar la economía al servicio y atención de las necesidades de las personas:✔ Nacionalización del sistema bancario y sectores estratégicos de la producción.✔ Control, regulación, limitación y transparencia de circulación de capitales.✔ Incremento del gasto público en servicios sociales. Reducción del gasto militar.✔ Reforma fiscal progresiva. Desaparición de los paraísos fiscales.
Localizar y reconvertir la economía con criterios ecológicos y de justicia social :✔ Crear y potenciar circuitos de producción-consumo locales encaminados a asegurar la soberanía alimentaria. Fomentar la inversión ética y con fines sociales✔ Decrecimiento en el uso de recursos y fomento del autoabastecimiento y ahorro energéticos.Desinversión en energías fósiles y nucleares.
Construir otro modelo cultural , político y económico más humano :✔ Implantación y desarrollo de democracias participativas y directas en el ámbito local y de empresa.✔ Aumento progresivo de control público de medios de producción estratégicos y de su gestión colectiva (empresas públicas, en crisis, nacionalizaciones, etc.)
Consideramos esencial aunar esfuerzos y por ello queremos hacer un llamamiento a la resistencia y la lucha a otros movimientos sociales y políticos y a la ciudadanía, para que la crisis no la paguen las clases trabajadoras y populares, y para no apuntalar un sistema que se demuestra injusto y caduco con lo recursos de tod@s. Ahora, más que nunca, es el momento de abrir caminos y construir esos “otros mundos posibles”. Juntos podemos.
Consideramos esencial aunar esfuerzos y por ello queremos hacer un llamamiento a la resistencia y la lucha a otros movimientos sociales y políticos y a la ciudadanía, para que la crisis no la paguen las clases trabajadoras y populares, y para no apuntalar un sistema que se demuestra injusto y caduco con lo recursos de tod@s. Ahora, más que nunca, es el momento de abrir caminos y construir esos “otros mundos posibles”. Juntos podemos.
FORO SOCIAL
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