Vídeo de la charla:
Momentos:
00:00:00 Titulares y libros
00:00:30 Bienvenida del Foro Social de Segovia.
00:05:23 Miguel Luis.
00:24:50 Manuel Cañada.
01:05:18 Intervenciones del público.
El miércoles 7 de marzo, se presentó en Segovia la Marcha Básica contra el paro y la precariedad.
El acto estuvo presentado y moderado por Ángel Luis, del Foro Social de Segovia, quien introdujo la presentación con unas palabras sobre las dificultades que muchas personas padecen actualmente para cubrir sus necesidades básicas y explicó que el momento actual necesita una marcha como esta que se convierta en un espacio de confluencia para la defensa de la justicia, la solidaridad y la libertad.
A continuación presentó a los ponentes: Migueli Luis, representante de “Parados en Movimiento” de Valladolid y Manuel Cañada, autor de libros como “La dignidad, última trinchera” y representante de la “Marcha Básica contra el paro y la precariedad”.
Comenzó tomando la palabra Migueli Luis, quien explicó el origen de la Marcha Básica como sucesora de Las Marchas de la Dignidad, y la definió como un grupo de grupos de organizaciones de precarios, en el que no intervienen partidos políticos ni sindicatos, organizados para pedir la RENTA BÁSICA UNIVERSAL.
Informó también de la organización de la Marcha Básica de 2018, centrándose en una sola columna que partirá de León del día 10 de marzo para llegar a Madrid el día 24 de marzo. Su recorrido se realizará en etapas que concluirá en actos en diversas localidades (Mansilla, Rioseco, Villanubla, Valladolid, Tordesillas, Villacastín, San Rafael…) concluyendo en una gran manifestación el día 24 de marzo, a las cinco de la tarde que llegará hasta el Congreso de Diputados con su reivindicación de una Renta Básica y otras demandas: derecho a techo y vivienda digna; derogación de la reforma laboral y trabajo en condiciones dignas; educación y sanidad públicas y de calidad; pensiones dignas garantizadas
Terminó su intervención con una profunda reflexión sobre la importancia de combatir la ignorancia y de hacer frente a la situación de precariedad actual de una forma activa y coordinada. Ejemplificó su explicación con explicaciones y ejemplos de argumentaciones que calan en el ideario general y que no ayudan en nada a solucionar la actual situación, manifestándose en expresiones tales como “para qué”, “es lo que hay”, “más vale lo malo conocido…” y otras similares. Ante esto lanzó con fuerza la idea de no bajar los brazos y luchar contra la precariedad por la dignidad y la justicia, empezando por la petición de una Renta Básica digna.
Tras esta intervención tomó la palabra Manuel Cañada, representante de la Marea Básica y de la Marcha Básica, quien recordó momentos de gran movilización social de nuestra sociedad, con dos puntos álgidos con el 15 M en 2011 y con las Marchas de la Dignidad en 2014. Pero acompañados de otras luchas valiosas, colectivas y de gran repercusión, como han sido las mantenidas por la PAH, las mareas, el SAT, los mineros, los parados y precarios… que hablan de una importante capacidad de movilización y autoorganización popular que en este momento tiene un nuevo momento de luchar por una sociedad más justa y de acabar con la precariedad.
Señaló los peligros y enemigos que esta lucha social tiene, comenzando por el ataque a los derechos básicos que se realiza desde altas esferas del poder económico y político. Desgranó el paisaje actual y su situación de gravedad, con su origen en la modificación del artículo 135 de la Constitución para dar prioridad al capital antes que a las necesidades de las personas; con el actual paro estructural, con dos millones de personas en situación de hambre, con cuatro millones afectados por la pobreza energética y con ocho millones de personas con salarios por debajo de los mil euros mensuales. Una sociedad con 166 desahucios diarios, con 11 suicidios al día y con medio millón de jóvenes que han tenido que emigrar para intentar buscar un futuro laboral.
Toda esta situación ha dibujado una sociedad en la que el paro y la precariedad son la situación normal, con unos derechos laborales y sociales a la baja de forma alarmante, sostenidas por una situación de represión que encabeza la ley mordaza que parapeta una situación de corrupción que parece no tener fin.
Frente a esto, las personas debemos mantener nuestra autoorganización y lanzar un pulso en el que defendamos la dignidad y la libertad de las personas con una Renta Básica Universal digna, al menos igualando los 684 € en los que actualmente se encuentra en España el umbral de la pobreza., pero también luchando a favor de las pensiones públicas, contra la obsolescencia, a favor de unas condiciones laborales dignas. Concluyó este apartado manifestando que sin el capitalismo está hundiendo a la sociedad, será preciso hundir al capitalismo para salvar a la sociedad.
Para terminar su intervención explicó que el arma fundamental con el que contamos es la movilización en la calle, que debemos apoyar con toda nuestra fuerza y que ya está en marcha con la huelga feminista (8 de marzo), las movilizaciones de los pensionistas y contra la ley Mordaza (confluyendo ambas el 17 de marzo) y la Marcha Básica (del 10 al 24 de marzo). Es necesaria una revolución pacífica y digna: “Hay que echarlos”.
Tras ambas intervenciones tuvo lugar un interesante debate entre los ponentes y el público asistente que se centró en las condiciones y dificultades de la Renta Básica; la situación agravada continuamente de parados, precarios y pobres; la autoorganización social y ejemplos de situaciones personales y respuestas sociales que provocan, tales como los desahucios, la obsolescencia, las situaciones laborales,… Un fuerte aplauso de los asistentes sirvió para agradecer a los ponentes su presencia y su lucha.
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