El vicepresidente de la Junta de Castilla-León, Sr. García-Gallardo, anunció el pasado jueves la pretensión de su gobierno de obligar a los profesionales sanitarios, a ofrecer a las mujeres embarazadas imágenes en 4D del feto así como la escucha de sus latidos.
Declaraciones hechas en rueda de prensa, y en compañía del consejero de Hacienda y portavoz del gobierno autonómico, que ni las matizó ni las desmintió, sin que a día de hoy existan garantías de que estas medidas no se vayan a aplicar, vistas las declaraciones y contradeclaraciones que se están sucediendo por parte de vox y PP.
Lo único cierto ,es que se trata de medidas tendentes únicamente a obstaculizar el ejercicio del derecho al aborto reconocido legalmente, derecho ya de por sí limitado en nuestra Comunidad por la imposibilidad que tienen las mujeres de ejercerlo en su ciudad de origen. En definitiva, medidas que son una injerencia intolerable en la capacidad de las mujeres para decidir libremente sobre su embarazo .
Esto es solo un ejemplo de lo que puede suponer la presencia de Vox en cualquier Gobierno.
Lo quieren enmarcar como políticas de fomento de la natalidad y prevención de los abortos.
El aborto no se previene con medidas estigmatizadoras ni coaccionando a las mujeres que han decidido abortar, sino con educación sexual y reproductiva, con información sobre métodos anticonceptivos, y oferta al alcance de todos para prevenir embarazos no planificados.
De la misma manera ninguna política de fomento de la natalidad puede basarse en medidas antiabortivas, sino en políticas que favorezcan la posibilidad de tener hijos en condiciones dignas tanto económicas como de conciliación.
Una vez más, comunicamos a la opinión pública nuestra firme voluntad de seguir defendiendo el derecho de las mujeres a decidir si quieren o no ser madres y en qué momento de su vida SIN INJERENCIAS.
Continuaremos actuando para remover los obstáculos que dificultan el ejercicio del derecho al aborto con garantías de confidencialidad, calidad y no injerencia:
1) Acciones preventivas en el ámbito de la Educación y salud sexual y reproductiva, formación y recursos humanos y económicos para esta tarea con el objetivo de prevenir los embarazos no planificados y las infecciones de transmisión sexual.
2) Denunciar la aplicación de cualquier medida que suponga un menoscabo del libre ejercicio del derecho al aborto.
3) Luchar contra el estigma sobre esta práctica que recae sobre las mujeres y los profesionales sanitarios que la realizan.
4) Que se cumpla la Ley y se incluya la formación en criterios de calidad y en las técnicas específicas más avanzadas para la I.V.E. en las carreras de Ciencias de la Salud y en la formación continua del personal sanitario. Ello ayudaría además, a desterrar el estigma.
5) Que se cumpla la Ley de Salud Sexual y reproductiva para que las mujeres que deciden abortar no tengan que hacerlo fuera de su territorio.
6) Remover las dificultades para que se hagan en la Red sanitaria pública con garantías de calidad, confidencialidad, libre elección de técnica (farmacológica o instrumental) y con garantías de que no habrá injerencias ni malas caras.
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